lunes, 13 de marzo de 2017

SEMANA N° 9 LENGUA CASTELLANA

Lectura para la Evaluación de periodo

Dónde

“Comieron poquísimo o nada. Los platos, aunque más sabrosos de lo normal porque  se había esmerado en condimentarlos un celador voluntarioso, tenía un sabor enemigo, y no había bocado que en la garganta no se tornara en ceniza. Ya se sabe que la inapetencia es obligatoria en las veladas de despedida,  por lo que, estando la ejecución fijada para las primeras luces de la mañana, el barón no cesaba de acalorarse por esa hipocresía de conceder a los condenados inútiles glotonerías,  mientas no se sentía escrúpulo en intoxicárselas con la idea del final inminente.
--Con la barriga vacía no será una bonita muerte --  se lamentó --. ¡Y tan temprano, además! Cuando más nos apasiona la luz…
Sanglimbeni  le dio la razón con su habitual estilo poético:
--En efecto, el crepúsculo sería una hora más adecuada. Con el medio luto, las nubes bajan, las sombras carmesíes  y violetas que persuaden humanamente a la paz. Así, por el contrario, nos parecerá sufrir un insoportable desahucio.
El soldado no dijo palabra y parecía mirarse los zapatos. Se había subido la solapa del blusón como si tuviera frío. Pero Narciso balbuceó:
--¿Qué más da que sea por la noche o por la mañana?
Y sin modales se echó a llorar”


Gesualdo Bufalino, Las mentiras de la noche.

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